Tremendas, tremendas!!!

Estaba yo buscando unos zapatitos bonitos para colocar aquí, pero esta mañana mi supermamá ha estado sacando fotos a todos mis zapatos y ponerlas en las cajas, así se ahorra una mucho tiempo en buscar el zapato adecuado.

Así que repasando mi colección he visto esta sandalia que tengo desde hace dos años y me he puesto exactamente 2 veces. Es preciosa, sí y pensaréis que soy tonta, pero es que hacen un daño que te cagas!!!

Entre estas sandalias que han aparecido hoy ante mis ojos y estos rayitos de sol que están empezando a salir por aquí, me he acordado de que tengo que volver a surtir todos mis bolsos de todo tipo de tiritas. Tiritas de plástico, de tela, las recortables, las de gel (las mejores del mundo mundial), una especie de stick que te lo das antes de poner el zapato y en teoría no te harán daño......

Sí, soy la niña de las tiritas.


Pero es que con los zapatos taaaaaan bonitos que tenemos, cómo vamos a dejar de ponerlos!! No, no, hay que ser buena cliente de parafarmacia y dejarte un pastón en tiritas e historias.

Aún así, a veces no son del todo efectivas. Se te mueve la tirita, se recoge, te sigue apretando... Así que alaaaa, a tomar por culo la tirita, con el pie al aire toda la tarde, cuando llegues a casa, ya los meterás en agua con sal, sacarás el botiquín con el agua oxigenada, el betadine, los algodones, la agujita para explotar la ampolla repleta de agua y por supuesto la tirita. Al día siguiente, zapatillas y a andar como si fueses tonta.

Con algunos zapatos es que es imposible aguantar, pero bueno, si no nos los ponemos ahora, algún día lo haremos, no se tira nada que está todo muy caro!!!!


Yo de momento, me voy a comprar unas tiritas